Presentación del libro “La crisis existencial de Europa”

Ante un auditorio lleno, el de la Fundación Rafael del Pino, tuvo lugar la presentación del libro “La crisis existencial de Europa“, escrito por César Molinas y Fernando Ramírez Mazarredo y editado por Deusto, una obra que analiza el impacto político de la última gran crisis financiera para el proyecto europeo. El evento contó con dos invitados de excepción: el excomisario europeo de Competencia y de Asuntos Económicos y Monetarios, Joaquín Almunia, y el exministro de Asuntos Exteriores y Cooperación, José Manuel García-Margallo.

Europeístas no podía perderse una ocasión como ésta, y asistió representada por Laura Domínguez y Hernán Vallés.

Almunia comenzó su intervención con buenos augurios: pese a las voces en contra de la Unión Europea que se oyeron más que nunca al calor de la crisis, en los últimos tiempos se han incrementado el apego a Europa y el apoyo al euro. Donde antes se hablaba del Brexit, ahora se habla del impulso pro-europeo de líderes como Macron.

El excomisario europeo también habló de los problemas de diseño de la moneda única, puestos de relieve por los vaivenes de la crisis. En especial, la falta de convergencia económica entre los estados, un cimiento necesario que debería haber ido de la mano de la voluntad política mostrada por los países de la zona euro. Pero la crisis también ha llevado a tomar decisiones positivas, como la unión bancaria. Para terminar, Almunia propuso la flexibilización de las normas fiscales y la creación de un ministerio europeo de Finanzas.

Por su parte, García-Margallo resumió en tres los pilares esenciales de Europa: la Grecia Clásica y su idea del individuo, la justicia romana  y la solidaridad de la tradición judeo-cristiana.

Un elemento interesante de su intervención fue la exposición del “trilema de Rodrik”, según el cual no se puede tener a la vez globalización, estados y democracia, sino sólo de estos elementos. Como ejemplos, citó China, que tiene estado y globalización, pero no democracia; Estados Unidos, que tiene estado y democracia pero está renunciando a la globalización, rechazando tratados como Tratado de Libre Comercio del Pacífico o el Tratado de Libre Comercio con la UE; o el ejemplo europeo, que limita los estados en favor de la globalización y la democracia. Para el exministro de Exteriores, la Unión Europea va hacia unos Estados Unidos de Europa, con un modelo federal en el que la unión política restará poder a los estados.

Para Margallo, Europa debe avanzar hacia un modelo de círculos concéntricos: el primero, el de la unión monetaria; el segundo, la unión política; y un tercero que incluiría países ajenos a la UE pero de cuyas relaciones son de gran importancia estratégica, como Reino Unido, Rusia  o Turquía.

Por último, los autores desgranaron algunas de las claves de la obra, como la necesidad de mantener el Estado del Bienestar para mantener el apoyo a Europa, afrontando problemas como la crisis demográfica mediante una mejora de la productividad y la recuperación del margen presupuestario para afrontar futuras crisis sin que los servicios públicos se resientan. Pero el libro también recoge una serie de propuestas para avanzar en la unión, como la cesión de competencias a la UE en materia de inmigración, seguridad o ciberseguridad (llegando a proponer incluso la creación de un FBI europeo), y fomentar la convergencia económica y la productividad.

Puedes ver el evento completo en el canal de Youtube de la Fundación Rafael del Pino.

Agradecemos a Hernán Vallés esta crónica.

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