actualidadeventos

XVI Jornada de Periodismo Coca Cola. ¿Quién paga la mentira?, ¿es de pago la verdad?

La Asociación de Periodistas Europeos viene celebrando cada año, con la colaboración de la firma Coca-Cola, las jornadas de periodismo, siendo esta la XVI jornada.

En esta ocasión y bajo el título “¿Quien paga la mentira?, ¿es de pago la verdad?, se celebra la sesión en el Hotel Eurostars Madrid Tower que cuenta con tres mesas de debate. La primera,  y a modo de sesión inaugural, está compuesta por Carmen Calvo, Vicepresidenta del Gobierno y Ministra de la Presidencia, Relaciones con las Cortes e Igualdad; Diego Carcedo, periodista y presidente de la Asociación de Periodistas Europeos, y Rafael Fernández-Quirós, director de Asuntos Públicos, Comunicación y Sostenibilidad de Coca-Cola Europa.

En la primera sesión de debate la mesa la compusieron: Teodoro García, Secretario General del PP; María Andrés, directora de la Oficina en España del Parlamento Europeo; Fernando Vallespín, Catedrático de Ciencia Política en el Universidad Autónoma de Madrid; Mira Milosevich-Juaristi, Investigadora Principal del Real Instituto Elcano y Sandrine Morel, corresponsal de Le Monde en España. Modera Joaquín Luna, periodista de La Vanguardia.

En la segunda sesión debatieron Ignacio Escolar, director de eldiario.es; José Antonio Carrizosa, director de Publicaciones del Grupo Joly; Borja Echevarría, director adjunto de El País; Nacho Cardero, director de El Confidencial, y Encarna Samitier, directora de 20 minutos. En esta ocasión modera Angels Barceló, directora de “Hora 25” de la Cadena SER.

En representación de Europeístas acudimos al acto su secretaria, Laura Domínguez y el tesorero, Germán Javier Sanz.

Comienza la sesión inaugural con la intervención de Diego Carcedo que presenta a los componentes de la mesa y se refiere, seguidamente, a esta nueva jornada agradeciendo la colaboración que viene prestando la firma Coca-Cola a estos eventos desde hace 16 años.

Pasa seguidamente a hablar de fake news, aclarando que para él no hay noticias falsas sino mentiras. Entiende que es una nueva forma de hacer la guerra que se va infiltrando a través de las redes y los medios de comunicación; estamos ante un problema que afecta a la sociedad, los periodistas están para dar noticias verídicas y no para lanzar bulos y mentiras.

Acto seguido interviene Rafael Fernández. La mentira, dice, existe desde que los humanos empezamos a relacionarnos. En la era digital en que nos encontramos, estamos inmersos  en especie de guerra sin armas que utilizan las redes y que ha ido incrementándose, todo esto tiene un coste y vamos al título de esta jornada: ¿quién paga la mentira? Habla de la marca que representa y de la veracidad de su información.

Toma la palabra la Vicepresidenta del Gobierno, Carmen Calvo que responde afirmando que la mentira la paga nuestra democracia, la paga una sociedad libre como la nuestra. El problema se coloca en un epicentro muy importante, los medios juegan una baza capital en una ética que nos engloba a todos los ciudadanos. ¿Qué pasa con la información, la rapidez, la veracidad? Habla de las líneas de derechos y libertades, los ciudadanos precisan información para participar pública y políticamente, y es un derecho fundamental que arropa la democracia; la veracidad cuesta en tanto que la falsedad es gratis.

Habla de la autorregulación o regulación, de aumentar el control de los medios. Los destrozos que para otros provocan la información falsa no se recuperan nunca, estamos en una sociedad del sinculpismo, tratando de que otro nos resuelvan los problemas, vivimos en la constante exigencia hacia el otro.

Comenta también que hay países dentro de la UE que están trabajando sobre la regulación del derecho a la información y la libertad de expresión. De cómo hay un alto porcentaje de ciudadanos que ya no confían en lo que ven u oyen a través de los muchos canales que se han abierto. El poder educativo, o lo contrario, que tienen los medios de comunicación es sumamente importante, nos jugamos grandes asuntos.

Terminada esta primera sesión inaugural se forma la primera mesa de debate que comienza con la intervención de Fernando Vallespín, que opina que lo que se está produciendo es una reestructuración completa del sistema – recomposición del poder-, de la democracia de los medios de comunicación a la democracia digital, y hay, dice, una pérdida de autoridad generalizada. Habla de la desintermediación detrás de la que hay una serie de empresas que mueven las redes, de sociedad de masas a sociedad individual, a sociedad de enjambres. Las redes van creando sociedades cuando las sociedades de toda la vida van desapareciendo. Lo que nos aportaban los medios ya se puede ver por internet.

María Andrés comienza su turno hablando del proyecto de Europa, desde sus conocimientos. A partir de la ampliación hay países que entienden que esta no se está haciendo bien. Así llegamos a la crisis económica, que si bien se va recuperando en el plano macro, cuando bajamos a la realidad esta ha dejado una brecha importante, y ahí es cuando empieza el auge al nacionalismo y las tensiones entre el norte y el sur que posteriormente se ha convertido en una tensión este-oeste.

Habla del Brexit y como las noticias falsas afectaron al resultado del referéndum, que posteriormente también ha influido en el triunfo de Trump. No obstante parece que vemos un cambio con la llegada al poder de Macron.

Actualmente la preocupación en el Parlamento Europeo es el aumento de los nacionalismos que marcan una serie de alertas. Respecto de la próximas elecciones entiende que no serán de una guerra izquierda/derecha sino de antieuropeos/proeuropeos.

Desde Europa, que son novatos en esto de las fake news, se está estableciendo una investigación a fondo y una constante vigilancia, además de planteándose una legislación al respecto. Se ha creado un grupo de trabajo para lucha contra las noticias falsas con muchas investigaciones y análisis. Se ha contratado una empresa de verificaciones, una  unidad anti propaganda rusa y se han destinado fondos para ello.

Seguidamente es el turno de Mira Milosevich-Juaristi, quien se remonta a la época de la guerra fría y de cómo los dos bloques lanzaban noticias falsas. Habla de cómo con las nuevas tecnologías la producción de las noticias se ha democratizado y esto ha destruido el buen trabajo de los periodistas. Hay una confusión entre información y conocimiento. En el mundo postmoderno, dice, la verdad siempre es discutible y no existe.

Para Teodoro García las noticias falsas vienen de lejos y se refiere como ejemplo la información lanzada en la primavera de 1912 cuando se publicó la cantidad de pasajeros salvados del hundimiento del Titanic. Ahora nos encontramos con las llamadas fake news que nacen con las nuevas tecnologías y que atacan al eslabón más débil de la sociedad. Hemos de luchar contra ellas, que han venido de la mano de las nuevas tecnologías, con su misma medicina.

Sandrine Morel nos habla de una iniciativa sobre una futura ley de manipulación informativa por parte de Macron, la cual le está costando mucho trabajo y aún no ha podido presentar, y comenta algunos puntos de la citada ley; seguramente se creara un nuevo estamento que vigile esto.

Nos habla de la experiencia de Le Monde desde 2016, que viene trabajando en esto, aun siendo muy criticados por ello, con una herramienta que actúa de filtro. También comenta que publican artículos pedagógicos tanto para alumnos como para profesores.

Fernando Vallespín nos habla de la verdad, de nuestra verdad, la comunidad no busca la verdad sino que cada uno busca la suya, lo que me viene bien a mi no a la comunidad. Nos enfrentamos a la manipulación, una nueva política, una nueva forma de sociedad.

María interviene de nuevo para hablar de las manipulaciones, a partir del Brexit, de las informaciones que nos llegan. Hemos de promover la información digital.

Mira pone el acento que sin la colaboración de las empresas de Silicon Valley, creadores de las nuevas tecnologías, no se podrá llegar a legislar y tener éxito. Por su parte Teodoro comenta que desde el punto de vista político, le entristece que el propio Parlamento lance FakeNews y de que está trabajando en un software que analiza y filtra las noticias falsas.

Sandrine apunta que Facebook y Twitter están colaborando con medios diarios internacionales, están comprometidos en el trabajo para desarbolar todo esto.

Para Fernando Vallespín la desintermediación ha hecho perder autoridad a los medios de comunicación; esto lo rebate de alguna forma María, que opina que los medios deben ganar de nuevo la autoridad  perdida no lanzándose detrás de las noticias, sino verificando y dando buena información.

A continuación se abre un  pequeño turno de preguntas sobre el tema tratado.

Terminado este primer debate y después de una pequeña pausa, se forma una segunda mesa entorno a la pregunta ¿quién paga la verdad?

En este bloque se expone en general cómo funciona cada uno de los medios representados en la mesa. Se comenta el papel de la publicidad como soporte económico y cómo este capítulo va en decremento una vez que las redes ofrecen la misma información y la prensa papel, sobre todo, va bajando ventas, siendo el futuro la prensa digital de pago solo posible bajo la premisa de la calidad de la información.

Ignacio Escolar presenta cómo funciona el diario que dirige y cómo ser independiente y depender más de los suscriptores que de la publicidad sin tener deudas, lo que les da una mayor libertad editorial.

Borja Echevarría opina que hay otra vía de financiación que son las fundaciones y no cree a pies juntillas que exista una relación prensa de papel con la verdad. Entiende que la verdad es libre y no pertenece a los medios. Para José Antonio Carrizosa no hay más forma de ser independiente que ser rentable.

Nacho Cardero comenta la importancia de la publicidad y también de la veracidad de la información, y entiende que la independencia económica nos lleva a la independencia informativa y es que el periodismo de calidad, dice, cuesta dinero.

Entiende Encarna Samitier que la información de calidad no se puede poner gratis al servicio del lector y, siendo así, ¿quién está dispuesto a pagar por noticias cuando las tienen gratis?

En general la opinión es la de hacer periodismo de calidad y de pago, que los lectores se sientan identificados con los medios de comunicación y confíen en las noticias que salen. Desde las empresas hay que fomentar el periodismo de rigor, las cabeceras de calidad y dar valor a la marca y la firma para dar valor a la profesión.

En este bloque también se dio un pequeño turno de palabra para preguntas.

Gracias a los seguidores de nuestras crónicas.

 


Agradecemos a Germán Sanz este resumen.
Os recordamos que todas nuestras crónicas se pueden comentar más abajo.

¡No te olvides de compartir!

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

*

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.